¿Sabías que correr puede hacer que tu cerebro sea más grande? ¡Así es! Un estudio publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) en 2016 reveló que correr de forma regular aumenta el volumen del hipocampo, una región del cerebro asociada con la memoria y el aprendizaje.
Los investigadores compararon un grupo de corredores regulares con un grupo de individuos sedentarios y encontraron que aquellos que habían estado corriendo durante varios años tenían un hipocampo significativamente más grande. Este hallazgo sugiere que el running puede tiene efectos positivos en la estructura del cerebro, especialmente en áreas clave para la cognición.
Otro estudio interesante, publicado en la revista Frontiers in Aging Neuroscience en 2019, examinó los efectos del running en la plasticidad cerebral en personas de edad avanzada. Los investigadores descubrieron que la práctica regular del running promovía la plasticidad cerebral, es decir, la capacidad del cerebro para adaptarse y cambiar a medida que se envejece. Los corredores mostraron mejoras en la conectividad funcional de redes cerebrales importantes, lo que se traduce en un procesamiento cognitivo más eficiente y una mejor función cerebral en general.
En definitiva, cada vez hay más estudios que demuestran que correr tiene beneficios positivos para el cerebro. Por ejemplo, puede aumentar el tamaño de las áreas clave del cerebro, como el hipocampo, que es responsable del aprendizaje y la memoria. También puede mejorar la plasticidad cerebral, que es la capacidad del cerebro para adaptarse y cambiar. Esto puede conducir a un mejor rendimiento cognitivo y una función cerebral saludable.
Si quieres darle a tu cerebro un poco de amor extra, ¡ponte las zapatillas y sal a correr! ¡Tu mente te lo agradecerá con piruetas neuronales!