Las sartenes de acero inoxidable 18/10 o quirúrgico son seguras, duraderas y saludables. Con la técnica adecuada evitas que los alimentos se peguen y, con un buen cuidado, duran toda la vida.
¿Por qué elegir una sartén de acero inoxidable?
¿Sabías que una sartén rallada puede liberar hasta 9.000 microplásticos por comida según un estudio publicado en Science of the Total Environment? Lo preocupante es que estos fragmentos invisibles terminan en nuestro organismo, alterando la microbiota intestinal y acumulándose con el tiempo. Muchas sartenes con recubrimientos antiadherentes —como el teflón— parecen prácticas al principio, pero al deteriorarse liberan sustancias químicas (PFAS) vinculadas con problemas hormonales, infertilidad e incluso cáncer. Algo similar ocurre con el aluminio sin anodizar, que puede filtrarse en los alimentos y se ha asociado con enfermedades neurológicas como el Alzheimer.
Frente a este panorama, las opciones más seguras son claras: el hierro fundido, que aunque es robusto y saludable puede resultar demasiado pesado en el uso diario, y el acero inoxidable, un material ligero, resistente y libre de tóxicos, que se posiciona como una de las mejores opciones para cocinar de manera segura y sin comprometer nuestra salud, incluso si se rayan estas sartenes de acero, a diferencia de las anteriores, no liberan sustancias perjudiciales para nuestra salud.
👉 Si quieres profundizar en los riesgos de cocinar con sartenes rayadas, desgastadas o de teflón en mal estado, te recomiendo leer este análisis sobre cómo estas sartenes pueden estar envenenando tu comida y por qué es mejor reemplazarlas por opciones seguras como el acero inoxidable.
Beneficios principales

- Material libre de tóxicos.
- Compatibles con todas las cocinas, incluida inducción.
- Resistentes a golpes, rayaduras y altas temperaturas.
- Durabilidad de décadas con buen mantenimiento.
Uso y mantenimiento de las sartenes de acero inoxidable
¿Qué hacer antes de usar una sartén de acero inoxidable por primera vez?
Una de las preguntas más comunes la primera vez que las usamos es si «necesitan ser curadas«. Este es un proceso que sella los poros de la sartén, evita el óxido y hace que la sartén se vuelva más antiadherente con cada uso, pero este proceso de curación solo se hace en las sartenes de hierro fundido.
A diferencia de las sartenes de hierro fundido, las de acero inoxidable no necesitan ningún proceso de curado antes del primer uso.
Lo único recomendable es:
- Lavarlas bien con agua caliente, un poco de jabón neutro y una esponja suave para eliminar restos de fábrica o aceites de protección.
- Secarlas completamente para evitar marcas de agua.
- A partir de ahí, puedes empezar a usarlas siguiendo la técnica correcta: precalentar en vacío y luego añadir el aceite para lograr esa antiadherencia natural que te explicamos a continuación.
👉 En resumen: no requieren curado, solo una buena limpieza inicial.
¿Cómo se evita que la comida se pegue? Uso y consejos

¿Cómo evitar que los alimentos se peguen en la sartén? Seguramente muchas veces has echado aceite en la sartén, la has puesto a calentar y luego has añadido la comida. Es lógico: así funciona con sartenes antiadherentes. Pero con las de acero inoxidable, esa técnica puede llevarte directo a un plato pegado y a una limpieza frustrante.
La forma correcta de usar una sartén de acero inoxidable es al revés que con las antiadherentes: primero se calienta la sartén vacía y, cuando está caliente, se añade el aceite. Así se crea una fina capa antiadherente natural que evita que la comida se pegue, en lugar de calentar sartén y aceite al mismo tiempo como solemos hacer con las “normales”.
¿Por qué funciona? Al calentar el metal antes del aceite, cierras los poros microscópicos de la superficie quedando el aceite en una capa uniforme y resbaladiza, en lugar de infiltrarse y atrapar la comida cuando se enfría o se expande el metal.
Resumen paso a paso
- Calienta la sartén vacía a fuego medio o medio-alto.
- Realiza la prueba del agua: echa unas gotas en la sartén, si “bailan” indica que la temperatura es correcta.
- Baja el fuego a medio o medio-bajo y añade el aceite.
- Espera a que el aceite brille o se expanda suavemente.
- Añade la comida y deja que se suelte sola al dorarse.
¿Qué tipo de acero inoxidable es mejor para cocinar?

No todos los aceros inoxidables son iguales. La diferencia está en su composición, y eso influye en resistencia, durabilidad y seguridad alimentaria.
Sartenes de acero inoxidable 18/10
El 18/10 (también llamado acero tipo 304) contiene 18% de cromo y 10% de níquel.
- El cromo aporta resistencia a la corrosión.
- El níquel aumenta la durabilidad y da un acabado más brillante.
Es la aleación más común en utensilios de cocina de calidad porque combina resistencia, precio razonable y seguridad alimentaria. Incluso si la sartén se raya, no libera toxinas peligrosas, a diferencia de los antiadherentes con teflón o recubrimientos sintéticos.
👉 Por eso, el 18/10 sigue siendo la elección estándar en cocinas profesionales y domésticas.
Acero quirúrgico (316): ¿vale la pena?
El acero quirúrgico 316 tiene una composición muy similar al 304, pero incorpora un extra de molibdeno.
- Esto lo hace más resistente a la corrosión, especialmente en ambientes con alta humedad o salinidad (como zonas costeras).
- Es ideal para personas con alergia o sensibilidad al níquel.
- Suele encontrarse en sartenes de gama alta, hospitales y aplicaciones industriales donde la resistencia química es crítica.
El inconveniente:
- Su precio es bastante más alto.
- En la práctica, en una cocina normal, la diferencia con el 18/10 no suele ser determinante.
¿Y qué pasa con las sartenes de acero inoxidable con antiadherente?
- También existen sartenes de acero inoxidable recubiertas con una capa antiadherente (teflón, cerámica o similares).
- Combinan la base resistente del acero inoxidable con la comodidad de cocinar sin que nada se pegue.
- El problema es que pierden las ventajas de durabilidad y seguridad del acero desnudo, porque con el tiempo ese recubrimiento se desgasta, se raya y puede liberar partículas.
- Si buscas una sartén “para toda la vida”, no son la mejor inversión. Pero si priorizas facilidad de uso y limpieza rápida, pueden ser una opción práctica a corto plazo.
Entonces, ¿cuál elegir?

- Acero inoxidable 18/10 (304):
✔️ Excelente para la mayoría de usuarios.
✔️ Más accesible en precio.
✔️ Duradero y seguro, incluso con rayaduras. - Acero quirúrgico 316:
✔️ Máxima resistencia a la corrosión.
✔️ Mejor opción si tienes alergia al níquel.
❌ Más caro y no siempre fácil de encontrar. - Acero inoxidable con antiadherente:
✔️ Más fáciles de usar (nada se pega).
❌ Se rayan y degradan con el tiempo.
❌ No duran lo mismo ni son tan seguras a largo plazo.
👉 En resumen: para el 90% de las personas, el acero inoxidable 18/10 es más que suficiente, seguro y duradero. El 316 vale la pena solo en casos especiales, y las versiones con antiadherente son cómodas, pero no tienen la misma vida útil ni seguridad a largo plazo.
Preguntas frecuentes (FAQs)
¿Sirven para cocinas de inducción y horno?
Sí, la mayoría de las sartenes de acero inoxidable son compatibles con inducción, gas, vitro y horno.
👉 Consejo: si vas a usarlas en horno, elige modelos con mango de acero (no plástico ni madera).
¿Cuánto duran y cómo saber cuál comprar?
Con buen cuidado, una sartén de acero inoxidable puede durar décadas, incluso toda la vida.
👉 Consejo: al comprar, fíjate en: base multicapa (mejor distribución del calor), mango remachado y compatibilidad con tu tipo de cocina.
¿Precio y marcas recomendadas?
El precio varía: desde 30-40 € en gamas medias hasta más de 100 € en modelos profesionales.
👉 Consejo: marcas como WMF, Zwilling, De Buyer, Fissler o Le Creuset ofrecen alta calidad y garantía de por vida.
Echa un vistazo a la variedad de marcas y precios aquí.
¿Se puede cocinar sin aceite?
Sí, aunque no es lo más recomendable. Alimentos con grasa natural (como carne o pescado graso) se pueden cocinar sin añadir aceite. Para otros, un poco de aceite ayuda a evitar que se peguen.
👉 Consejo: usa la técnica de precalentar primero la sartén y luego añadir el aceite para lograr antiadherencia natural.
¿Cómo se limpian las manchas oscuras o de quemado?
Las manchas de comida quemada o restos se eliminan con una mezcla de agua caliente, bicarbonato o vinagre. Déjalos actuar y frota suavemente.
👉 Consejo: evita estropajos metálicos agresivos; mejor usa esponjas suaves o estropajos de fibra.
¿Por qué aparecen manchas de colores o como de arcoíris?
Son depósitos minerales del agua o de ciertos alimentos, y no afectan a la salud.
👉 Consejo: elimínalas fácilmente limpiando con un poco de vinagre blanco o jugo de limón diluido.
¿Se pueden lavar en el lavavajillas?
Sí, la mayoría son aptas. Pero con el uso continuado pueden perder brillo.
👉 Consejo: alterna entre lavavajillas y lavado a mano con agua caliente y jabón para conservarlas impecables.
¿Qué utensilios se pueden usar?
Puedes usar madera, silicona o incluso acero inoxidable, ya que no tienen recubrimiento que se raye.
👉 Consejo: aunque los utensilios metálicos no dañan la sartén, los de silicona o madera prolongan su aspecto como nuevo.
¿Son pesadas?
Depende del modelo y grosor de la base. Las multicapa suelen ser más pesadas, pero también cocinan mejor.
👉 Consejo: si buscas comodidad, opta por modelos con mango ergonómico y base media; si priorizas rendimiento, una sartén más robusta es mejor inversión.
👉 Si quieres proteger tu salud, evita caer en la trampa de las sartenes más comunes. Aquí te contamos cuáles pueden estar envenenando tu comida sin que lo sepas.



